Crees que tu hija sería más feliz si pudiese llevar al supermercado su tutú de bailarina, pero te da miedo que tus vecinos se pregunten si ya son los carnavales. ¿Deberían ponerse lo que quieran? ¿O es preferible elegir la ropa que llevarán tus hijos?

Aunque tengas miedo de que tu hijo quiera llevar en pleno verano las zapatillas para la nieve y la bufanda de sus dibujos animados favoritos, recuerda que los niños que eligen su propia ropa y se visten solos disfrutan de muchos beneficios.

¿Por qué deberían elegir ellos mismos?

Independencia. Los niños que eligen su propia ropa se sentirán menos dependientes de sus padres, y desde muy pequeños aprenderán a tomar sus propias decisiones.

Confianza. Lograr algo por sí mismo, sin la ayuda de los demás y sin recibir críticas ni desaprobación, hará que tus hijos se sientan bien en su propia piel y no se inquieten demasiado por lo que piensen los demás.

Mejorarán sus habilidades motoras. Los niños que se ponen su propia ropa podrían desenvolverse mejor cuando empiecen a escribir una carta a los Reyes Magos, a dibujar su colegio o a comer por sí solos.

Aprenderán sobre la ropa adecuada según la temperatura. Si los padres siempre toman las decisiones por ellos, no aprenderán tan fácilmente que en verano la camiseta será de manga corta y los calcetines se quedarán en el armario.

Los padres deberán facilitar a los niños la tarea de vestirse por sí solos, de las siguientes maneras:

1. Su ropa estará ordenada. Colocaremos las camisetas de manga corta en el mismo cajón, y los calcetines blancos estarán separados de los calcetines de colores y dibujos. Los niños encontrarán rápidamente las prendas que estén buscando.
2. No tendrá más ropa de la que realmente necesita. Cuantas menos prendas tenga su armario, más fácil será vestirse por sí mismo.

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