Prepara tu cuerpo y mente para el parto con el Yoga

El yoga prenatal es uno de los mejores deportes que puedes hacer antes de que nazca tu querido bebé. Es importante que encuentres el mejor centro de yoga en tu ciudad o que compres un buen DVD para que lo puedas practicar en tu propia casa. Escucha a tu cuerpo y haz lo que creas que te va a beneficiar a ti y a tu bebé.

Algunos de los posibles beneficios del Yoga incluyen:

Desarrolla resistencia y fuerza:

Cuando el bebé crece dentro de tu cuerpo, se necesita más energía y fuerza para que seas capaz de soportar el peso. Con el yoga fortalecerás las caderas, la espalda, los brazos y los hombros.

Equilibrio:

Tu equilibrio se verá desafiado constantemente ya que el feto crece dentro de tu cuerpo. Emocionalmente estarás más susceptible debido a los aumentos de la progesterona y el estrógeno. El yoga ejercita con ahínco la respiración y un control postural óptimo por lo que serás capaz de equilibrarte física y mentalmente.

Alivia las tensiones de la espalda baja, caderas, pecho, espalda superior, cuello y hombros:

Cuando el bebé crece, más tensión aparecerá en estos grupos musculares. Tu cuerpo tenderá a curvarse hacia delante debido al mayor tamaño de tu panza. Las caderas estarán más apretadas debido al peso del bebé. A medida que tus senos aumenten de tamaño, la espalda y el pecho irán tensionándose junto con el cuello y los hombros.

Relaja el sistema nervioso:

A través de una respiración profunda, el sistema nervioso entra en modo parasimpático, que es el responsable de la relajación. Cuando tu cuerpo entra en este modo, el aparato digestivo funciona correctamente, tiendes a dormir mejor, y el sistema inmunológico se ve mejorado.

Preparación pre parto:

En todas las posturas de Yoga es necesario controlar la respiración de forma consciente. Esto luego se transferirá al momento del parto, lo que te permitirá estar más “cómoda”. Al exhalar profundamente las tensiones sentidas en el parto se minimizan.

Conexión con tu bebé:

La práctica del yoga te permitirá focalizar la atención en lo que está pasando dentro de tu cuerpo. A través de los ejercicios con la respiración y las posiciones corporales, te volverás más consciente de lo que está pasando dentro de ti.

Aumenta la circulación sanguínea:

La circulación se ve reforzada y las articulaciones y los músculos se alargan durante la práctica del Yoga. Prevenimos coágulos y tu inmunidad es mayor, por lo que la creación de un ambiente sano para el bebé prospera.

Respiración:

Esta es una buena herramienta para el trabajo durante las contracciones. Si respiras conscientemente, la presión arterial y la frecuencia cardíaca se regulan en modo parasimpático. Mamá calmada equivale a bebé tranquilo.

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