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La colorterapia es una parte muy importante de la medicina china y ayurvédica, y utiliza los colores y la cantidad de luz que necesita el globo ocular para crear diferentes efectos según el color (y la cantidad de éste) empleado. Hoy en día, la colorterapia es una medicina complementaria muy utilizada tanto para adultos como para niños, sus resultados excelentes han sido mostrados.

La colorterapia se basa en siete colores que, colocados adecuadamente en la posición complementaria de su correspondiente Chackra, resuenan con las energías curativas propias del cuerpo y alivian todo aquello que no nos hace falta para nada: estrés, dolores, depresión, etc., mientras lo sustituyen por energía positiva y protección. Cada color se alimenta de la energía de su Chackra particular, por eso tiene que estar bien situado, porque si no, ningún efecto (ni positivo, ni negativo) se logrará.

Las correspondencias de la colorterapia y sus efectos son los siguientes:

Color violeta: corresponde al Chackra situado en la corona de la cabeza. El color violeta está conectado al cerebro, y representa el conocimiento libre y la conciencia espiritual. Su efecto es tranquilizante, y puede ayudar a una mejora de la memoria de tu bebé.

Color índigo: corresponde al Chackra de la frente.

Color azul: corresponde al Chackra de la garganta. Junto con el índigo, simbolizan la libre expresión. Las tonalidades azules, al ser colores fríos, suelen relacionarse con la calma y la tranquilidad. A parte de ayudar a tu bebé a dormir mejor por las noches o a no estresarse por su entorno agitado, el color azul ayuda particularmente a una mejora de la digestión, aliviando los dolores de tripita de tu bebé y haciendo que este descanse mejor.

Color verde: corresponde al Chackra del corazón y del pecho/mama. El color verde representa esperanza y protección, y como el azul, también conlleva calma y tranquilidad. El verde en colorterapia se utiliza para fortalecer el sistema inmunológico y evitar, en lo posible, esos catarros y fiebres tan comunes en bebés.

Color amarillo: corresponde al Chackra del plexo solar/pecho. El color amarillo es un color cálido que no relaja, sino que estimula y da seguridad en sí mismo. A parte de mejorar la autoestima (no creo que ningún bebé, por el momento, necesite esto), estimula el hígado y el estómago, haciendo que estos funcionen a su ritmo y aliviando algún que otro posible problema.

Color naranja: corresponde al Chackra de la zona baja de la barriga. Como el amarillo, es un color cálido que denota alegría y creatividad. Además, mejora la sociabilidad de tu bebé, y quién sabe, a lo mejor le arranca alguna sonrisa que otra. Físicamente, protege la zona reproductiva.

Color rojo: cálido donde los haya, el rojo forma parte del Chackra de la ingle. Este es un color bastante usado por madres y padres para sus bebés, ya que estimula el apetito de éste. Si os fijáis, muchos restaurantes están decorados en tonalidades rojizas. ¿Por qué será...?

Como he dicho antes, cada color tiene que estar situado en su zona, porque sino el efecto que queremos lograr será nulo. No hay que tener miedo de la colorterapia, porque no tiene ni efectos contrarios ni secundarios. Dada su fácil aplicación y sus buenos resultados, es genial para tu bebé: qué mejor que tu pequeño se divierta viendo colores mientras el efecto de estos le ayuda a encontrar el equilibrio y a aumentar su energía y tranquilidad para estar en paz con su alrededor y con sí mismo. Pues venga, a que estamos esperando… ¡vamos a jugar con colores!

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